Estimado Sr. Buffet:
En primer lugar, darle la bienvenida a nuestro país y desearle la más grata estancia. Permítame que este humilde servidor le haga unas pequeñas recomendaciones para facilitarle su paso por nuestra península:
– Lleve siempre la cartera vigilada, sobre todo si pasea por las zonas más históricas de nuestra ciudad (no le citaré ninguna, para no levantar suspicacias; usted vigile sólo su mochila y los bolsillos de su pantalón o chaqueta). Le puedo asegurar que no todos los ciudadanos de a pie andamos con 35.000-40.000 millones de dólares en el bolsillo para invertir.
– Por mucho que le hablen de la calidad de vida en nuestras costas, no, reitero,no se deje llevar por la euforia en inversiones inmobiliarias; nuestro sector no atraviesa uno de sus mejores momentos (a pesar de que gente interesada le diga lo contrario). Espere al año que viene, que seguro que encuentra suelo a un precio mucho más barato.
– Si tiene la suerte de entrevistarse con alguno de nuestros gobernantes…. no les crea !!!. Le diran que nuestra economía goza de muy buena salud, y que mientras el resto del mundo se encuentra inmerso en un proceso de recesión económica, nosotros «solo estamos sufriendo una leeeve desaceleración». Le comento que en nuestro extenso vocabulario el término «recesión» no existe.
– Si Mariano le invita a cenar en su casa, no olvide llevarle una caja de puros. Pero, sobre todo, no le pregunte por «su gente».
– Traiga los dólares cambiados de la aduana. No se preocupe por la comisión que le cobre su banco; la moneda esta muy devaluada y le va a salir rentable pagar en euros.
– No olvide felicitar a la Ministra Chacón; ha sido mamá recientemente.
Sin otro particular, espero una vez más que disfrute de su estancia en nuestro país. Y, sobre todo, disfrute de nuestra extensa oferta turística. Intentaremos hacerle lo más grata posible su visita.
Muchas gracias por todo, y que disfrute Mr. Buffet.
Pensamientos en alto 